Laura RODRÍGUEZ / San Sebastián de los Reyes, Madrid / 05.03.2021
Debajo de todas estas ramas está la senda ecológica de Sanse. Se trata de un espacio protegido y recuperado para el Aula de Naturaleza del municipio, con el objetivo de que las y los escolares de Sanse aprendan, entre otras cosas, a avistar aves o a identificar distintas especies de árboles. El temporal Filomena se despachó a gusto en esta zona y la ha dejado impracticable. Suerte que, al borde del desastre, haya intervenido Bartolomé Barragán: vecino de Sanse desde hace 30 años, “Amigo de los quelonios” (y, claro está, de los quercus) y experto en el cuidado de las encinas, que cuenta con autorización de la Comunidad de Madrid para intervenir en este espacio.
Su trabajo de recuperación de los espacios naturales de Sanse comenzó hace 20 años, con una autorización que le permitía intervenir en todo el término municipal. Después, se limitaron las autorizaciones. Y ahora las tiene que pedir específicamente para el espacio en el que quiera operar. Su ultima actuación, este mismo año, en el encinar de Los Retamales.
Ahora, ante la catástrofe ecológica que ha supuesto el temporal Filomena, Bartolomé y sus compañeros se han vuelto a ofrecer para echar una mano, y han conseguido la licencia de la Comunidad de Madrid que les permite limpiar la senda ecológica y dejarla lista para que puedan volver a disfrutar de ella los niños y niñas de Sanse.
A punto de terminar la temporada de poda de la encina, ahora Bartolomé y sus compañeros tendrán que esperar hasta que puedan volver a terminar lo empezado. Un gran trabajo por el que, tanto desde Aula de Naturaleza, como desde el propio Ayuntamiento de San Sebastián de los Reyes, les están más que agradecidos.