Laura RODRÍGUEZ / San Sebastián de los Reyes, Madrid / 07.12.2022
El pasado 8 de enero, Santiago Sánchez Cogedor partió desde San Sebastián de los Reyes con destino Qatar. En total, serían 6.800 kilómetros de un viaje a pie que el deportista y aventurero español aprovecharía para concienciar sobre la importancia de cuidar el planeta. Y, para ello, se había propuesto ir recogiendo residuos y plantando árboles a lo largo del recorrido.
En marzo, su viaje daba un primer giro inesperado tras la invasión de Ucrania por parte de Rusia, lo que llevó a Santiago a hacer un paréntesis para permanecer en la frontera con Polonia ayudando a los refugiados de la guerra.
El giro dramático vendría poco después cuando, a principios de octubre, Santiago dejó de publicar en sus redes sociales tras haber compartido un último mensaje que ponía en alerta a la familia: «La cosa está caliente, pero todo bien».
Desaparecido desde entonces, a finales de octubre Irán Internacional confirmaba que Santiago estaba encarcelado en una prisión de Irán, retenido contra su voluntad por haber visitado la tumba de Mahsa Amini, una joven activista que falleció a manos de la policía iraní por llevar mal colocado el velo.
Y allí permanece, según las últimas informaciones.
Contra ello solo cabe un arma: alzar la voz para que se conozca su historia y que se escuche en Irán donde está prisionero.
Por eso, para visibilizar su situación, familiares y amigos han organizado una concentración silenciosa a las puertas de la Embajada de Irán en Madrid, un acto que tendrá lugar el domingo 18 de diciembre, a las 12.00 horas, para el que la familia y amigos piden la mayor asistencia y apoyo posible.