Guillermo ESCOBAR / San Sebastián de los Reyes, Madrid / 25.10.2019
Está claro que siempre nos liamos cuando llega el momento de cambiar la hora. Temido por unos y deseado por otros, el cambio se producirá durante la madrugada del próximo sábado, 25 de octubre. Hemos salido a la calle para conocer las impresiones sobre esta tradición, que a más de uno va a pillar por sorpresa.
Ante la advertencia de que puede ser de las últimas veces que nos adaptemos a la llegada del invierno, la verdad es que los vecinos de Sanse no se ponen de acuerdo.
Unos a favor y otros en contra, al menos casi todos ven el lado bueno de mover las manecillas del reloj.
Anochecerá antes, los días serán más cortos y disminuirá la intensidad luminosa, elementos ligados a los temidos síntomas de la depresión estacional y sus trastornos del sueño, aunque no todos los entrevistados los padecen.
Para evitar que nuestro reloj biológico altere su ritmo, los expertos recomiendan practicar ejercicio físico para mejorar el estado de ánimo, dormir al menos 8 horas y cuidar la alimentación. Recuerden que a las tres serán las dos por lo que el domingo nos despertaremos más descansados, porque aunque el despertador suene todos los días a la misma hora,siempre viene bien ganarle una hora de sueño al reloj.