Laura RODRÍGUEZ / San Sebastián de los Reyes, Madrid / 01.09.2016
Con una ovación de la plaza y el guiño de sus compañeros, ayer Paco Foro se despidió del encierro de Sanse tras 31 años ejerciendo como pastor. Él, como todos los pastores del encierro, anteriormente había sido corredor. Fue en 1985 cuando “por fin” le llamaron para ejercer esta importante función.
La misión de los pastores es mantener la seguridad durante el encierro, siendo las únicas 14 personas que lo hacen desde dentro del recorrido. Para ello se sitúan, estratégicamente y por parejas, en varios puestos a lo largo de la manga, para ir dándose el relevo y asegurando tramos durante la carrera.
A lo largo de estos 31 años, Paco Foro ha vivido momentos buenos y no tan buenos, y ha visto evolucionar el encierro de Sanse, que ha pasado de ser una tradición centenaria pero local, a convertirse en un referente nacional e internacional, por características como la velocidad de las carreras, la calidad de la mayoría de los corredores frente a la masificación y las medidas de seguridad que exporta a otros encierros en todo el país.
Para Paco son 31 años llenos de recuerdos de los que se queda y se lleva lo mejor: el aplauso y el agradecimiento de sus compañeros y de todo el público de los encierros de Sanse.